Parece que estos días no se habla de otra cosa en las notícias, ya sea prensa, radio, tv.. en todos los medios aparece continuamente la palabra «corrupción», y esto es algo que nos afecta a todos los níveles, no solo en la política.
La corrupción parece ser algo innato en la naturaleza humana y que algunas personas son más propensas a desarrollar.
Hay quien dice que el poder y/o el dinero corrompe y se escudan en esta sencilla argumentación para entender lo que ocurre actualmente en el mundo.
Dicho esto, la corrupción impacta en el día a día de la gestión de proyectos de múltiples y diversas maneras, por ejemplo: compras con sobrecostes, selección de proveedores en concursos públicos «a dedo», desviación de fondos, sobornos, comisiones, sobres, etc
¿Qué podemos hacer como gestores de proyectos para evitar, identificar y controlar las malas prácticas?
El PMI (Project Management Institute) establece un código ético a seguir: PMI Code Of Ethics que debe ser aprobado y firmado por todo aquel miembro de la asociación, con riesgo a ser expulsado y a perder las certificaciónes obtenidas (PMP, CAPM, etc) si se incumplen las cláusulas indicadas.
Este código establece la forma correcta de operar y conjuntamente a las «best practices» descritas en la guía PMBOK ayudan a trabajar correctamente y éticamente en los proyectos.
Establecer una Oficina de Gestión de Proyectos (PMO) en la organización es una muy buena manera de mejorar el control de los proyectos, supervisando las acciones desde un punto centralizado y detectando cualquier posible intento de fraude al sistema.
Para entender mejor el papel de las PMO en la gestión, os recomiendo este artículo: Que es una PMO y sus beneficios para la empresa
Todo y eso, en última instancia el tema de la corrupción, me temo que se basa en valores éticos y de cultura (aquí en España donde resido, estamos padeciendo múltiples y constantes escándolos de corrupción en proyectos y a nivel político en las más altas esferas).
Con esto último quiero decir, que si bien aplicar unas buenas prácticas de control de compras, de control del valor ganado, etc puede ayudar a minimizar el riesgo y hacer un mejor seguimiento, al final, la ética y los valores de las personas implicadas en el proyecto es lo que prima, y para ello no hay ninguna «certificación» sino más bien una buena formación en valores y ética personal y profesional, que se debería transmitir a nivel de educación básica en las escuelas y en la propia familia.
¿Que opinas tú? ¿Es posible evitar las practicas ilegales y eliminar la corrupción en los proyectos?
6 respuestas
Alejandro:
Te felicito por haber tocado este tema. que como dices, no se trata de algo nuevo, si no, histórico.
Yo creo o postulo que este tipo de problema social, solo se podrá reducir, con la ayuda de la PMO en las entidades del sector gobierno, y con el monitoreo y control que los ciudadanos hagan de afuera hacia adentro.
Me refiero a que los ciudadanos debemos participar activamente en esto. En especial los miembros o certificados por el PMI.
Por eso es que he recomendado que estas PMO reporten a las autoridades de control de mas alto nivel y lo hagan públicamente.
Buenas José,
Muchas gracias por tu comentario y aportación a la discusión, estoy completamente de acuerdo con tu opinión, el acabar con la corrupción es una tarea que nos pertoca a todos. Saludos!
Estimado Alejandro:
Gracias por articular tan bien este tema de la corrupción que debemos tener bien ubicado para que tras el diagnóstico podamos aplicar la medicina y posteriormente entrenar cada día, tomar vitaminas éticas y estar alertas ante cualquier nuevo síntoma.
Hay que trabajar para limpiar lo que contamine nuestro entorno personal y profesional, busquemos soluciones sólidas compartiendo este tema con nuestros equipos de proyectos. Que lo urgente no mate a lo importante, que no siempre nos dejemos llevar por la inmediatez. Usemos más Ishikawas!
Felicitaciones por tus artículos!
Gracias Jorge por tu amable comentario y aportación a la discusión. Saludos!
Los valores nos definen, formar a las personas, incluye la formación en todos sus ámbitos y los valores no deberían ser los grandes olvidados.
Gracias Manuela por tu aportación. Saludos!