Hay muchos factores que pueden afectar positivamente o negativamente al éxito de un proyecto, entre los más destacados podríamos incluir:
- Compromiso de la alta dirección
- Correcta elección de la metodología y el equipo de gestión
- Involucración de los interesados
Todos estos puntos son claves para llevar a cabo un proyecto exitoso, entiendo como tal aquel proyecto que acaba con el alcance, tiempo y coste esperados, entregando un resultado de calidad y con la satisfacción del cliente.
¿Gestión tradicional o Agile?
Últimamente se viene hablando mucho de las prácticas ágiles y como estas pueden ayudar a entregar valor y en muchos casos se menosprecia la gestión más tradicional por fases o waterfall.
Desde mi punto de vista, no hay ganadores ni perdedores en la batalla del método de gestión infalible, ya que como tal no existe.
Pero si que existe el buen gestor de proyectos, con experiencia, con visión, con soft skills trabajadas a lo largo de los años, con buen juicio, con ética e integridad.
Con esto quiero decir, que como he mencionado al inicio del artículo, uno de los puntos principales es la elección de un buen equipo de gestión.
Un gestor de proyectos que tenga la experiencia suficiente para gestionar la complejidad del proyecto.
Una complejidad que se puede dar a muchos niveles:
- Gestión de los procesos
- Gestión de las relaciones humanas
- Gestión de la incerteza (riesgo)
Para gestionar un proyecto complejo, necesitaremos contar con un director de proyecto experimentado, que conozca bien las diferentes herramientas y métodos de gestión (tradicional y agile).
Alguien con la capacidad de elegir el mejor enfoque en cada momento, dependiendo de factores tales como:
- Nivel de definición del alcance
- Nivel de variabilidad en los requisitos
- Criticidad del Proyecto
- Deadlines de tiempo y coste
- Complejidad del Proyecto
- Cultura Empresarial
- Experiencia del equipo
- Etc
Analizando todos estos y otros muchos factores, un buen gestor de proyectos debería ser capaz de hacer un «tailoring» adecuado al proyecto.
Con el concepto de «tailoring» me refiero a la capacidad de escoger los mejores métodos y herramientas para gestionar los diferentes niveles de complejidad del proyecto.
Y no solo escogerlos, sino adaptarlos a la realidad del proyecto. Esta adaptación de las herramientas y los procesos de gestión son desde mi punto de vista un factor determinante en el éxito de un proyecto.
Al igual que no es lo mismo comprarse un traje de oferta en unos grandes almacenes que ir a una sastrería y que te diseñen uno a medida, tampoco se puede dar una solución perfecta para todo tipo de proyectos.
Es aquí donde la experiencia y el buen hacer del «sastre» marcarán la diferencia en la calidad del resultado final.
¿Qué conocimientos debería tener todo Gestor de Proyecto?
Dicho esto, un buen profesional debería tener una combinación de experiencia y conocimientos técnicos, más un conjunto de habilidades blandas bien trabajadas.
Yo personalmente recomendaría:
- Certificarse como PMP o CAPM: Esto dará una base de conocimiento completa el profesional: Buenas prácticas, vocabulario y estructura mental.
- Certificarse en Agilidad: Conocer el «mindset» Agile y las diferentes herramientas, prácticas y marcos de referencia tales como Scrum, Kanban, XP
- Potenciar y formarse en habilidades blandas: empatía, inteligencia emocional, oratoria, persuasión, liderazgo, negociación, etc
Los puntos anteriores los recomendaría a cualquier profesional que esté ejerciendo como director de proyecto o aspire a ello.
Limitarse a «vivir» de la experiencia sin formarse o quedarse solo con una visión de la gestión (ya sea la tradicional o la agile), será negativo dado que no permitirá realizar un buen «tailoring» o «traje a medida» para el proyecto, al desconocer parte de las opciones disponibles.
¿Tú que opinas? ¿Añadirías alguna otra recomendación?
Como siempre, tus comentarios son más que bienvenidos en la sección dedicada a los mismos al final de este artículo.
13 respuestas
Me parece interesante el artículo, nos da una mejor idea de las habilidades que necesita un Director de proyectos.
Me gustaría que en los próximos artículos se cuente acerca de las experiencias de distintos Directores de Proyectos en la práctica.
Gracias
Gracias Norah por tu amable comentario, tomo nota de tu interés para futuros artículos. Saludos.
Gracias Alejandro por tu post. Yo añadiría trabajar y tomar consciencia las virtudes cardinales: justicia, para tratar a todos con respeto, prudencia, para saber si lo que hacemos nos lleva hacia nuestro objetivo, fortaleza para atacar esos objetivos que nos exigen paciencia y templanza, asumiendo nuestra labor con humildad y actitud de servicio
Gracias María del Mar por tu amable comentario y aportación. Saludos!
María, muy buen aporte. ¡Gracias por compartir!
Excelente artículo, como ya nos tienes acostumbrados, Alejandro.
Contribuyo con un aporte: Es conveniente, al igual que lo estamos haciendo con los enfoques ágiles, empezar a abordar y a certificarse en el campo de proyectos sostenibles. Allí tenemos líderes como GPM, quienes tienen el proceso de certificación de GREEN PROJECT MANAGER.
Hola Alfonso,
Totalmente de acuerdo, la sostenibilidad es importante a todos los niveles, incluido en la gestión de proyectos. Saludos!
Excelente articulo. Siempre tan oportunos y claros. Ser Gerentes de Proyectos es mas que una profesión, ya es una forma de ser en el ámbito laboral. Hay que formarse permanentemente en todos los ámbitos que mencionas.
Gracias Maria Eugenia por seguir nuestros contenidos, saludos!
Como siempre certero. Al menos coincido plenamente. La » ideología»(waterfall o Agile) no debe contar como única guía.
Es el proyecto el que manda, sus características y las de los stakeholders. Yo tambien votó por un PM formado en waterfall y en agile; eso, más su experiencia junto con el contexto del proyecto y el equipo, será lo que deba guiar su actuación.
Gracias José Luis por tu comentario. Saludos!
Gracias por la nota. Incluyamos OKR’s como herramienta para la gestión de proyectos, sin olvidar a los clásicos, al final, eso es un traje a la medida.
Gracias Marco por tu aportación 🙂